FE
La fe es el fundamento de lo que se espera, el argumento (o
prueba) de las cosas que no se ven (Heb. 11,1).
Sin la fe es imposible agradar a Dios (Heb. 11,6). El justo
vive por la fe (Rom. 1,17).
Lo que nos hace alcanzar la victoria sobre el mundo es
nuestra fe (1 Jn. 5,4).
Id por todo el mundo, predicad el Evangelio a toda criatura, el que creyere y fuere bautizado se salvará… (Mc. 16, 15-16)
Todo el que invocare el nombre del Señor será salvo. Pero ¿Cómo
invocarán a Aquel en quien no han creído? ¿Y cómo creerán sin haber oído hablar de El
¿Y cómo oirán si nadie les predica)… La fe viene por el oído y al oído llega
por la palabra de Cristo (Rom. 10, 9-7).
Pedro les dijo: Determinó Dios que por mi boca oyesen los
gentiles la palabra del Evangelio y creyesen (Hech. 15, 7).
Como el cuerpo sin el espíritu es muerto, así también la fe sin obras está
muerta (San. 2, 26)
Yo he venido como luz al mundo, para que todo el que crea en
Mí no permanezca en tinieblas (Jn. 2, 46).