En el mismo informa que alrededor de las tres de la tarde del domingo 17 de enero pasado, jóvenes enmascarados lanzaron abundante pintura roja sobre la fachada del templo católico francés regenteado por la FSSPX.
Algunos fieles vieron a los vándalos y dieron su informe a la policía, quien llegó tiempo después y no hay resultados positivos de su accionar…
“El Sr. Sarkozy no se ha movido para denunciar "un escándalo digno de las horas más oscuras de nuestra historia".
Mons. Vingt-Trois (Arzobispo de París) no nos han expresado su "solidaridad", y mucho menos su indignación por el templo de Dios profanado…
Y los medios de comunicación: no tuvieron a bien dar a conocer los hechos para el público.
Esto es, después de todo, una iglesia católica...”
Tomado de Santa Iglesia Militante.