"¡Ah, cuántas veces el Señor os ha preservado de la muerte o de muy graves peligros por virtud de la Santa Misa que habíais oído! San Gregorio el Grande así lo afirma en su 4º Diálogo: Per auditionem Missae homo liberatur a multis malis et periculis. Es indiscutible, dice este sabio Pontífice, que el que asiste a la Misa será librado de muchos males y peligros hasta imprevistos. Más aún: según enseña San Agustín, será preservado de una muerte repentina, que es el golpe más terrible que los pecadores deben temer de la Justicia divina."
San Leonardo de Porto-Mauricio
(1676-1751)